Creo que la vida está hecha de retazos de historias que ocurren simultáneamente. A veces no nos damos cuenta de que estamos hechos de historias, de momentos, de instantes que merecen ser contados, pero que la mayoría de veces no nos paramos a reflexionar sobre ellos, estamos hechos de historias con alma.
Todo tiene un comienzo y esperemos que sin final.
Toda historia comienza con un deseo, todos soñamos con encontrar un trabajo que nos haga sentir, vibrar y que nos guste, pero a veces el camino no es fácil, a veces tenemos un camino de obstáculos para llegar a nuestro destino. A veces lo intentamos y tenemos sueños rotos, nos encontramos con momentos de luz, otros de sombras y tinieblas. A veces necesitamos un halo de esperanza, un brillo entre tanta oscuridad.
Siempre he creído en el poder de las palabras. Cada una de ellas puede iniciar una página en blanco y una página en blanco es futuro. Cada palabra puede ser el aleteo de una mariposa, eso impone respeto y motivación a partes iguales. Para mí las palabras son magia.
Quizás por eso las palabras me ayudan a comunicar todo lo que me apasiona. Para poder escribir páginas en blanco, para suscitar cambios, para conjugar futuro y aportar un granito de arena a este mundo.
Las palabras nos permiten expresar todo lo que sentimos, lo que nos emociona, lo que queremos transmitir a los demás, nos permiten dar rienda suelta a nuestra imaginación, nos permiten expresar opiniones que pueden ser correctas o erróneas en función del punto de vista que empleemos. ⠀
Escribir nos sirve para pensar, para preguntar, para transmitir, como forma de expresión, es un estilo de vida, es una manera de observar la vida y a las personas que nos rodean.»
Tenemos que ser conscientes que hay una conexión entre lo que decimos, cómo lo decimos y lo que pretendemos hacer sentir al público a través de las palabras.
¿Por qué escribo historias con alma?
A la temprana edad de 8 años comencé a descubrir todo ese mundo que aprendemos con los libros, un mundo en el que tiene cabida la imaginación, la creatividad, las historias bonitas que pueden acabar con final feliz o las historias duras, ambos tipos de historias dejan huella y consiguen que las recordemos por los que nos hicieron sentir en el momento en el que las leímos.
De pequeña era una niña risueña, pero tímida. Me gustaba zambullirme en los libros que me ofrecían mil y una historias; aún hoy en día disfruto mucho con un buen libro, con una buena historia, de esas que pierdes la noción del tiempo, hacen volar tu imaginación e incluso te hacen viajar a lugares cercanos o recónditos.
A esa misma edad en la que empecé a zambullirme en los libros, comencé a escribir mi propia historia como escritora, primero como una terapia y al cabo de los años se ha convertido en una pasión, en mi mejor forma de expresarme.
No fue hasta hacer un par de años cuando me di cuenta que escribir era una forma de vida para mí y que podría profesionalizarlo, y en eso estoy en búsqueda de un sueño.
¿Te preguntarás con qué sueño? La respuesta a esta cuestión es sencilla, mi sueño es crear historias con alma de esas que dejan huella y calan hondo en el alma, esas historias que te invitan a reflexionar, que llevan pinceladas de situaciones reales, una pizca de crítica, un toque de magia y un análisis de la realidad que me rodea, que nos rodea.
Estas historias con alma tienen el objetivo de aportar esperanza, alegría, ilusión, magia, amor, melancolía, valentía, amor a las palabras escritas, y sobre todo poner de manifiesto los principios y valores que tenemos en esta sociedad, además de ser un homenaje a la vida a través de las palabras.
Además, puedo ayudar a las marcas a humanizarse para que muestren su lado más emocional y logren captar la atención de sus usuarios de manera emotiva, de tal forma que marquen la diferencia, utilizando técnicas de marketing como son el storytelling y el marketing emocional.
Desde hace unos meses, he comenzado a compartir mis historias con alma en Instagram (también etiquetadas como #historiasemocionales), y aquí dejo algunos ejemplos, te invito a leerlas:
Este post fue escrito mientras se escuchaba esta canción a modo de inspiración, te invito a leerlo mientras la escuchas.
Y a ti, ¿te gustan las historias con alma?